Náquira insinúa que empleados del centro juvenil habrían orquestado un complot contra el ministro de Justicia
En un sorprendente giro de acontecimientos, el director del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación de Lima, conocido popularmente como ‘Maranguita’, Francisco Náquira, habría señalado que la fuga de seis internos extranjeros ocurrida la mañana del viernes 2 de mayo sería parte de un complot político contra el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Arana.
Según las declaraciones de Náquira, este incidente estaría vinculado a una supuesta respuesta de los trabajadores del centro juvenil ante el anuncio de importantes reformas al sistema penitenciario peruano. «Hemos estado visibilizando algunos materiales y podemos percibir, y es lamentable anunciar esto, de que habría cierta participación, descuido intencional del personal que trabaja al interior», habría manifestado el director.
El funcionario habría enfatizado que cuentan con una orden de «tolerancia cero» por parte del ministro Arana frente a cualquier conducta que pueda desacreditar el proceso de rehabilitación. «Esto se da justo cuando se viene anunciando medidas que van a optimizar el sistema penitenciario y van a mejorar las condiciones en los centros juveniles a nivel nacional. En estos casos no hay coincidencias», habría sentenciado Náquira, insinuando una clara relación entre las reformas anunciadas y la fuga.
Mientras tanto, el Programa Nacional de Centros Juveniles del Ministerio de Justicia habría informado a través de un comunicado que tanto la Policía Nacional del Perú como el Ministerio Público habrían dispuesto la detención preliminar de los trabajadores presuntamente involucrados en el incidente. Además, se habría declarado en reorganización el Programa Nacional de Centros Juveniles con el objetivo de «garantizar la seguridad y el proceso de reinserción de los adolescentes».
Hasta el momento, ningún representante de los trabajadores del centro juvenil habría respondido a estas acusaciones que los señalan directamente como presuntos cómplices de la fuga.
