El hecho se dio dentro de un chifa ubicado en SJL, las autoridades no logran dar con los responsables del crimen
Un día de compartir en familia se habría convertido en tragedia cuando sicarios atacaron a sangre fría a un padre y su bebé dentro de un chifa en San Juan de Lurigancho. Giancarlo Silva Bazán, quien trabajaba como taxista, habría muerto instantáneamente tras ser impactado por múltiples disparos, mientras que su pequeña hija de apenas un año y medio también habría sido alcanzada por las balas.
La menor, quien se encontraba frente a su padre durante el ataque, habría recibido dos impactos de bala y fue trasladada de emergencia al Hospital Hipólito Unanue. A pesar de los esfuerzos médicos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), la inocente no habría logrado sobrevivir, convirtiéndose en una víctima más de la creciente ola de violencia que azota la capital.
Según testigos, el crimen habría ocurrido durante la tarde del domingo 4 de mayo, cuando dos sicarios a bordo de una motocicleta lineal llegaron hasta el establecimiento ubicado en una zona comercial del distrito. Sin mediar palabra, los atacantes habrían ingresado al local y disparado directamente contra Silva Bazán, quien había llegado para recoger a sus hijas, una adolescente de 19 años y la menor fallecida.
Lo que llama poderosamente la atención es que familiares de las víctimas habrían asegurado que Silva no era víctima de amenazas ni habría tenido problemas previos que justificaran este brutal ataque. Esta versión estaría siendo investigada por las autoridades, quienes hasta el momento no habrían identificado ni capturado a los responsables.
Este terrible caso se suma a la preocupante estadística de homicidios por sicariato en Lima, donde la población vive con miedo constante ante la aparente incapacidad de las autoridades para frenar estos crímenes que cobran vidas inocentes.
¿Hasta cuándo la ciudadanía tendrá que soportar esta situación?
¿Dónde están los resultados de los operativos policiales que tanto anuncian las autoridades?