Una mujer de Amazonas con problemas renales pasaría tres días tendida en el suelo por falta de camas
El hospital Regional de Lambayeque estaría al borde del colapso total, según revelaría una fiscalización sorpresa realizada por la consejera regional Manuela Zeña Ñanfuñay. La situación habría alcanzado niveles desesperantes: pacientes durmiendo sobre cartones en los pasadizos, familias obligadas a comprar jeringas en farmacias externas, y un sistema de salud que habría abandonado por completo a los más vulnerables.
Durante la visita al área de Emergencias, la consejera habría encontrado a una mujer natural de Bagua, Amazonas, tendida en el piso de un pasadizo conectada a un suero. La paciente, quien padecería problemas renales, habría sido referida desde el nororiente del país hasta Chiclayo en busca de atención médica. Al no encontrar una cama disponible en el hospital, se habría visto obligada a improvisar su «habitación» con cartones y una frazada en el pasadizo.
«La señora ya tenía 3 días durmiendo sobre cartones en el pasadizo», revelaría la consejera regional, quien habría conversado con el médico de turno y las enfermeras. Estas últimas le habrían confirmado que no existían camas disponibles en todo el establecimiento.
Crisis de Insumos Básicos
Pero la falta de camas sería solo la punta del iceberg de una crisis mucho más profunda. El hospital Regional de Lambayeque no contaría con insumos médicos básicos como jeringas, obligando a los familiares de los pacientes a salir del hospital para comprar estos elementos en boticas y farmacias externas.
Esta situación afectaría especialmente a las familias de escasos recursos, quienes ya enfrentarían gastos por el tratamiento de sus familiares y ahora tendrían que costear también los insumos que el Estado debería proporcionar gratuitamente.
Autoridades Citadas a Rendir Cuentas
Ante esta grave situación, el Consejo Regional habría citado al gerente regional de Salud, Yonny Ureta Núñez, y al director del hospital, César Guzmán Saavedra, para que respondan por el estado crítico del establecimiento sanitario.
El hospital Regional de Lambayeque atiende no solo a pacientes de Chiclayo, sino también a derivaciones de otras regiones del norte del país, lo que agravaría aún más la saturación del servicio de Emergencias.
Esta situación expondría una vez más las graves deficiencias del sistema de salud público peruano, donde los ciudadanos más vulnerables serían quienes pagarían las consecuencias de la ineficiencia administrativa y la falta de inversión en infraestructura hospitalaria.