Once disparos a quemarropa la violencia que no para en el país
Un nuevo episodio de violencia extrema sacude al país. En la ciudad de Ica, sicarios asesinaron a sangre fría a un ciudadano venezolano mientras compartía un almuerzo con amigos en un restaurante del barrio Santa Rosa. El brutal atentado, que habría sido filmado por los propios criminales, evidencia el nivel de crueldad que ha alcanzado la delincuencia en territorio peruano.
El ataque ocurrió cuando la víctima se encontraba departiendo tranquilamente en el local. En cuestión de segundos, un sicario vestido con buzo plomo y capucha negra se acercó y le disparó hasta en 11 oportunidades a quemarropa. La frialdad del criminal y la precisión del ataque sugieren que se trataría de un crimen planificado.
Las cámaras de seguridad captaron un detalle que podría ser clave para la investigación: una mujer con capucha anaranjada abandonó el establecimiento segundos antes del atentado. La Policía Nacional del Perú investiga si esta persona habría citado a la víctima al lugar y actuado como cómplice en el plan criminal.
Los investigadores manejan la hipótesis de que este asesinato se trataría de un ajuste de cuentas, modalidad que se ha incrementado en los últimos meses en diferentes regiones del país. La víctima habría intentado huir del lugar, pero la cercanía de los disparos le impidió salvar su vida.
Agentes de la División de Investigación Criminal (Depincri) llegaron al lugar para acordonar la zona e iniciar las diligencias correspondientes. En un operativo posterior, lograron capturar a varios ciudadanos venezolanos que presuntamente formarían parte de la organización criminal responsable del crimen.
Un aspecto particularmente perturbador del caso es que el asesinato habría sido grabado por los propios sicarios, lo que indicaría que buscaban enviar un mensaje específico. Este material audiovisual ya estaría siendo analizado por los investigadores como evidencia fundamental para esclarecer los hechos.
El crimen se suma a la creciente lista de asesinatos violentos que se registran diariamente en el país, evidenciando la grave crisis de seguridad ciudadana que enfrentan los peruanos y extranjeros residentes.
