La mandataria habría intentado blindar a su primer ministro frente a la moción que prepara el Congreso
La presidenta Dina Boluarte habría intentado proteger a su primer ministro, Gustavo Adrianzén, de la moción de censura que prepararía el Congreso tras la masacre en Pataz, donde 13 mineros habrían sido asesinados debido al alto índice de inseguridad ciudadana y criminalidad.
Durante una conferencia en Palacio de Gobierno realizada el último lunes 5 de mayo, la jefa de Estado habría utilizado como ejemplo al censurado ministro del Interior, Juan José Santiváñez, para defender al premier, señalando que con su salida no se habría solucionado la situación actual en Pataz, localidad que fue declarada en estado de emergencia y que su Gobierno no habría podido proteger adecuadamente.
«Al Congreso de la República: están corriendo las firmas para censurar al premier Adrianzén y algunos ministros. Yo les pregunto a los congresistas: hace poco censuraron al ministro del Interior, al ministro Santiváñez, ¿con la censura y con la salida del Ejecutivo del ministro Santiváñez se solucionó el problema de la inseguridad ciudadana? Señores congresistas, es fácil recabar las firmas y censurar. Miremos el otro lado de la moneda», habría expresado la mandataria.
Es preciso recordar que en la última conferencia de prensa de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), Adrianzén habría cuestionado la denuncia sobre el secuestro de los mineros en La Poderosa, lo que habría generado indignación en la población.
En otro momento de su intervención, la mandataria se habría negado a la censura y control político del Congreso contra su primer ministro tras su cuestionada gestión en la lucha contra la inseguridad ciudadana. Boluarte habría mencionado que, con la salida de Adrianzén o la de otros miembros del gabinete, «el crimen en Pataz no se resolverá».
«Señores congresistas, el tema del crimen de Pataz no se va a resolver sacando al premier Adrianzén o censurando algunos ministros. Cuando sale un ministro e ingresa otra persona, por más que tenga conocimiento de cómo funciona el ministerio por dentro, toma semanas, meses, afianzar el trabajo y eso es demora para las políticas de gobierno que se aplican», habría manifestado.
Además, la presidenta habría solicitado que no se haga uso político del asesinato de los mineros. Sin embargo, en reiteradas ocasiones anteriores, Boluarte habría utilizado diversos casos para promocionar el tema de la pena de muerte pese a su inviabilidad, así como la ley del terrorismo urbano —considerada como un «saludo a la bandera» por especialistas en la materia.
«No hagamos uso político del asesinato de estas 13 personas y del dolor de estas 13 familias. Si bien es cierto estamos entrando a una etapa electoral, que esta sea basada en programas de políticas de gobierno, no en ataque al Ejecutivo», habría agregado la mandataria.
