Burgomaestre denuncia que no fue informado sobre toque de queda ni participó en conferencia de prensa
El alcalde de Pataz, Aldo Mariño, habría revelado detalles inéditos sobre su reciente visita a Palacio de Gobierno el pasado lunes 5 de mayo. Según declaró el burgomaestre, la presidenta Dina Boluarte lo habría hecho esperar aproximadamente 4 horas antes de atenderlo, pese a que ingresó a las instalaciones a las 10 de la mañana.
«Quiero rechazar porque no he estado en la conferencia de prensa, no me han invitado, no he participado de dicha reunión. Nosotros ingresamos a las 10 am a Palacio de Gobierno y recién la presidente nos atendió a las 2 de la tarde», habría manifestado Mariño.
En una revelación que pondría en tela de juicio la transparencia del Ejecutivo, el alcalde habría señalado que al ingresar a Palacio les habrían confiscado sus teléfonos celulares, dejándolos incomunicados y sin conocimiento de lo que ocurría en el exterior, incluida la conferencia de prensa donde se anunciaron medidas drásticas para su distrito.
«Al ingresar, nos quitan los celulares, nosotros desconocíamos lo que pasaba o sobre la conferencia de prensa que habían estado dando», habría denunciado el burgomaestre.
Según el testimonio de Mariño, la reunión originalmente estaría pactada para tratar la construcción de la carretera 10C. Sin embargo, tras los recientes sucesos violentos en la zona, incluyendo el asesinato de 13 mineros en La Poderosa y el ataque a la minera Coriwayra donde criminales habrían tomado 50 rehenes, la agenda habría cambiado drásticamente.
El alcalde habría expresado su disconformidad con el manejo de la situación por parte del Ejecutivo: «Me siento no escuchado. Pienso yo que no tienen un plan de acción, no tienen un plan de trabajo de cómo hacer frente a la criminalidad».
En una revelación particularmente impactante, Mariño habría afirmado que se enteró del toque de queda impuesto en su distrito apenas al salir de Palacio, cuando un periodista le consultó sobre esta medida. «Ni sabía yo del toque de queda, pero siento que el toque de queda va a ser algo así como el estado de emergencia, un papel firmado que al final no va a dar resultados», habría manifestado.
El burgomaestre también habría lanzado duras críticas contra el premier Gustavo Adrianzén, a quien calificó como una «persona indolente» que «está de espaldas al pueblo» por haber dudado inicialmente del secuestro de los 13 mineros.
«Pienso que está de espaldas al pueblo una persona indolente, que estoy seguro de que si hubiese sido su familia los secuestrados, hubiese actuado en el acto, pero como eran gente pobre que va a buscar una oportunidad laboral… no le importó y eso duele», habría señalado Mariño.
Estas declaraciones estarían generando polémica en el contexto de una creciente crisis de seguridad en la región minera, donde las autoridades locales reclamarían mayor presencia del servicio de inteligencia y acciones concretas más allá de decretos de emergencia.