Agente fue detenido por sus propios colegas en panadería del Cercado de Lima; víctima de 21 años, permanece en estado crítico
Un joven de 21 años, padre de una bebé de apenas 3 meses, se encuentra en estado crítico tras recibir un disparo en el estómago por parte de un policía que habría estado en presunto estado de ebriedad. El incidente ocurrió en la cuadra 2 de la avenida Cárcamo, en el Cercado de Lima, generando indignación entre los vecinos del sector.
Según testigos presenciales, el agente policial habría estado deambulando por la zona en aparente estado de alteración, portando su arma de fuego de manera errática. Los vecinos describieron que el efectivo caminaba «para arriba y para abajo» con la pistola en mano, ingresando y saliendo de pasajes sin motivo aparente, comportándose «como un loco».
La víctima, quien vive frente a la casa de su abuela, se encontraba conversando tranquilamente en la vía pública cuando habría sido interceptado sin mediar palabra por el policía, quien le disparó directamente. «Sin explicación, sin decirle nada, de frente le disparó», relató entre lágrimas la madre del joven agredido.
La intervención se produjo dentro de una panadería, donde el arma de fuego y el celular del efectivo policial quedaron sobre el mostrador del establecimiento. Fueron sus propios colegas quienes procedieron a detenerlo tras el llamado de emergencia realizado por los vecinos al 105 y a la comisaría local.
El joven herido fue trasladado de emergencia al Hospital Loayza, donde permanece con pronóstico reservado debido a la gravedad del impacto de bala en su estómago. Su familia denuncia que al acudir a la comisaría de Monserrate para interponer la denuncia formal, no habrían recibido el apoyo necesario para procesar el caso.
«Lo único que yo quiero es justicia para mi hijo, porque mi hijo ahorita se encuentra grave y yo que he venido en la comisaría de Monserrate a pedir apoyo y no me quieren apoyar para poner la denuncia», manifestó la madre del afectado, visiblemente consternada por la situación.
El caso ha generado preocupación sobre los protocolos de control del personal policial en estado fuera de servicio, así como cuestionamientos sobre el manejo de armas de fuego por parte de efectivos que presuntamente se encontrarían bajo efectos del alcohol o sustancias.
Las autoridades competentes deberían estar investigando las circunstancias exactas del incidente, mientras la familia exige justicia y espera que el joven padre de familia pueda recuperarse de sus graves heridas.