GeneralesPolicía traidor habría asesinado a su propio compañero por proteger a delincuentes en SJL

Avatar photo Redacción CP13 de junio de 2025

Paul Galicía Falcón: El suboficial que habría vendido su honor por dinero sucio y causado la muerte de un héroe de 24 años

¡SEÑORES, ESTO ES INDIGNANTE! Mientras ustedes duermen tranquilos en sus casas, confiando en que la Policía Nacional los protege, resulta que tendríamos serpientes dentro de la propia institución. Y no hablamos de cualquier serpiente, sino de Paul Galicía Falcón, un suboficial que habría traicionado a su uniforme, a sus compañeros y a todo el pueblo peruano.

Este miserable habría causado la muerte del joven Julio César Calderón Díaz, de apenas 24 años, un policía honesto que tenía sueños, que quería ser abogado, que estudiaba para sacar a sus padres adelante. ¡Pero no! Un traidor dentro de sus propias filas habría terminado con su vida.

¿Saben lo más asqueroso de todo esto? Que Paul Galicía Falcón, con cinco años «sirviendo» en la policía, habría estado consultando por WhatsApp cómo conseguir armas sin serie. «Si alguien tiene fierrito limado por ahí de una», habría escrito este delincuente uniformado. ¡Qué vergüenza! ¡Qué asco!

Mientras el pueblo peruano se queja de la inseguridad, mientras las madres de familia no pueden salir tranquilas a trabajar, mientras los comerciantes viven con miedo, resulta que tenemos policías que estarían trabajando PARA los delincuentes. ¡Es una burla!

Este Paul Galicía Falcón no es policía, señores. Es un delincuente más, pero peor, porque habría jurado proteger y servir, y en lugar de eso habría decidido servir al hampa. Habría estado asignado al área de delitos de la comisaría de Santa Elizabeth, ¡imagínense cuántas investigaciones habría saboteado! ¡Cuántos casos habrían fracasado por culpa de este traidor!

Y ahora, por culpa de este miserable, una familia llora la muerte de su hijo. Silvia Pérez, la tía de Julio César, tuvo que ir a la morgue a recoger el cuerpo de su sobrino. Un joven que soñaba con ser abogado, que estudiaba criminalística, que quería prosperar. ¡Pero un traidor dentro de la policía habría truncado sus sueños!

¿Saben qué es lo más indignante? Que según el tío de la víctima, esto no era ni siquiera un operativo planificado. Era una «verificación» porque ya tenían información de que este Paul Galicía Falcón estaría involucrado con delincuentes. ¡Las autoridades YA SABÍAN que tenían una manzana podrida y mandaron a policías honestos a una trampa!

Julio César Calderón Díaz murió con tres balazos en el estómago. Tres balazos que habrían sido disparados por los cómplices de este traidor uniformado. Y ahora, tres policías más están heridos por culpa de la traición de uno de los suyos.

¡BASTA YA! ¡Hasta cuándo vamos a tolerar que tengamos delincuentes uniformados! ¡Hasta cuándo vamos a permitir que maten a los policías honestos para proteger a los corruptos!

Paul Galicía Falcón no merece llevar el uniforme policial. Debería pudrirse en la cárcel junto a sus cómplices criminales Julio Alberto Robles y Roland Jesús Ramos Pretell. ¡Que paguen con todo el peso de la ley!

Y a las autoridades les decimos: ¡INVESTIGUEN A FONDO! ¿Cuántos más como este Paul Galicía Falcón tendremos infiltrados? ¿Cuántos casos más habrán fracasado por culpa de estos traidores?

¡JUSTICIA PARA JULIO CÉSAR CALDERÓN DÍAZ! ¡CÁRCEL PARA PAUL GALICÍA FALCÓN!

Seremos la voz de aquellos que no son escuchados, exponiendo injusticias y casos de corrupción. Buscamos generar impacto real en la sociedad, transformando la indignación en acción colectiva y construyendo una comunidad comprometida con la transparencia y la justicia.