Megaoperativo revela red de corrupción que habría afectado la alimentación escolar en Áncash, La Libertad y Lima
El Ministerio Público ejecutó este miércoles un megaoperativo que resultó en la detención preliminar de tres personas investigadas por organización criminal y tráfico de influencias en el marco del caso Qali Warma. Las diligencias, a cargo del Noveno Despacho de la Fiscalía Supraprovincial Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, incluyeron el allanamiento de 13 inmuebles en las regiones de La Libertad, Áncash y Lima.
Los detenidos son Aníbal Morillo (60) y Jorge Luis Silva (47), quienes habrían utilizado un esquema de contactos en la Gerencia Regional de Salud (Geresa) para facilitar de forma irregular apoyo a la empresa Frigoinca S.A.C. en permisos y fiscalizaciones sanitarias, con el objetivo de obtener contratos con el programa de alimentación escolar Qali Warma.
También fue capturado Luis Álvarez (37), exfuncionario de la Unidad Territorial de Qali Warma en Áncash, quien habría recibido sobornos para manipular reportes de volúmenes de productos cárnicos entregados al programa.
El coronel Luis Lira informó que continúa la búsqueda de dos personas que serían detenidas en el megaoperativo. Uno de los no habidos es Óscar Acuña Peralta, hermano del líder de Alianza Para el Progreso (APP) y ex gobernador de La Libertad, César Acuña Peralta. Según el Ministerio Público, Óscar Acuña habría participado en el esquema de tráfico de influencias.
La investigación, que se encuentra en etapa preparatoria (cuarta fase), apunta a la existencia de una organización criminal enquistada en el Estado que habría manipulado procesos de selección y adjudicación para favorecer a empresas proveedoras de alimentos, entre ellas Frigoinca. Según Fiscalía, esto habría perjudicado la salud de miles de escolares en varios departamentos del país.
Durante las diligencias se incautaron equipos electrónicos, teléfonos celulares y dinero en efectivo. El operativo estuvo a cargo del fiscal provincial Reynaldo Abia Arrieta y un equipo de cinco fiscales adjuntos, en coordinación con personal policial de la División de Inteligencia de la Dirección contra la Corrupción (Dircocor).


