Investigación de China Polo Dominical revela cómo intermediarios ofrecerían el documento sin exámenes, utilizando presuntamente la identidad de personal del ministerio para validar el fraude.
Una nueva investigación realizada por el equipo de China Polo Dominical ha puesto al descubierto una presunta red criminal dedicada a la tramitación ilegal de licencias de conducir. Según los hallazgos, estos individuos ofrecerían la obtención del «brevete» sin la necesidad de rendir los exámenes obligatorios, lo que sugiere una alarmante trama de c0rrupc1ón que podría involucrar a funcionarios del propio Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
El modus operandi de esta red sería sorprendentemente sencillo. A través de contactos en redes sociales y mensajería, los interesados solo necesitarían proporcionar una foto de su DNI, su huella digital y su firma. Con estos simples requisitos, y un pago que oscilaría entre los 600 y los 10,000 soles, los tramitadores prometerían una licencia original y registrada en el sistema oficial.
Durante la investigación, se identificó a Malorin Yumara Valdeón Moreano como una de las personas que presuntamente ofrecería este servicio ilegal, asegurando que el trámite es «100% confiable». Asimismo, se detectó que esta red no solo se limitaría a licencias de conducir, sino que también ofrecería pasaportes y visas.
Uno de los hechos más graves revelados es la supuesta suplantación de identidad de funcionarios para generar confianza en sus víctimas. El sujeto detrás del número 921169083, identificado como Julio Moisés Acosta Escalante, se habría hecho pasar por Pedro Olivares Muñoz, un funcionario real del MTC. Para dar credibilidad a su engaño, este individuo habría enviado fotografías del DNI y del fotocheck institucional del mencionado trabajador. Sin embargo, al momento de concretar la transacción, la cuenta bancaria de destino no pertenecía al supuesto funcionario, sino a Marián Ariana Aspajo Linares, una joven de apenas 19 años.
Hasta el cierre de este informe, se intentó contactar al señor Pedro Olivares Muñoz para obtener su descargo, sin éxito. La gran interrogante que queda en el aire es si él estaría realmente coludido con esta red o si su identidad estaría siendo utilizada sin su consentimiento para respaldar estas actividades ilícitas.
Lo que sí parece indiscutible, señores, es que la facilidad con la que se ofrecen estas licencias de conducir ilegales, saltándose todos los protocolos de seguridad, haría suponer que existirían funcionarios dentro del MTC implicados en este negocio. Esto representa un peligro latente para la seguridad vial, poniendo en las pistas a conductores que jamás habrían demostrado tener la capacidad para estar detrás de un volante.