El gabinete más cuestionado de la historia reciente del Perú enfrenta una crisis sin precedentes
Señores y señoras, esta boca no la calla nadie para decirles la verdad que los medios tradicionales no se atreven a contar. Mientras la presidenta Dina Boluarte se escapa a Japón e Indonesia con cinco de sus ministros más cuestionados, el país se desangra con la mayor ola de denuncias por c0rrupc1ón que habría enfrentado un gabinete en la historia reciente del Perú.
Las cifras son demoledoras y hablan por sí solas: 9 denuncias constitucionales y 26 investigaciones fiscales pesan sobre el gobierno de Boluarte, convirtiendo a este gabinete en el más cuestionado que habría tenido el país. Pero la cosa no para ahí, porque hasta el primer ministro Eduardo Arana estaría siendo investigado por presuntos actos de c0rrupc1ón, incluyendo una investigación vinculada al sonado caso «Los Cuellos Blancos».
¿Será casualidad que en plena crisis decidan irse de viaje? No lo creemos. Mientras el pueblo peruano sufre las consecuencias de la inseguridad, la inflación y la falta de oportunidades, nuestros funcionarios se estarían dando el lujo de viajar con nuestros impuestos, huyendo de las investigaciones que los acosan.
Este gobierno que llegó prometiendo «manos limpias y sin c0rrupc1ón» ahora tendría que explicar por qué enfrenta 35 procesos judiciales y fiscales en total. Son números que dan vergüenza y que demuestran la crisis institucional más gr4v3 que habría vivido el país en los últimos años.
Lo más indignante es que, mientras se acumulan las denuncias, el gobierno de Boluarte habría continuado respaldando medidas polémicas como la amnistía para militares y policías procesados por terrorismo, y habría mantenido sus críticas a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. ¿Será que buscan protegerse creando un escudo legal?
Desde China Polo Dominical seguiremos vigilantes, porque sabemos que detrás de cada viaje, de cada decisión y de cada silencio, podría haber más secretos que el pueblo peruano merece conocer. Esta boca no la calla nadie cuando se trata de defender la transparencia y la justicia.
¿Hasta cuándo más tendremos que soportar este espectáculo? La respuesta la tienen ustedes, ciudadanos conscientes que merecen un gobierno que trabaje para el pueblo y no para sus propios intereses.